Punto de partida

El solar rectangular, muy alargado, estrecho y en cuesta, de muy difícil acceso para la construcción, estaba ocupado en su totalidad por una casa antigua de piedra y tapial con su cuadra adyacente.

Dicha edificación comparte un muro medianero longitudinal de 18m con una vivienda habitada.

Parte de este muro reposa en un peñasco inamovible que hay que incluir en el diseño de la nueva vivienda.

Descripción del proyecto

Solventada la primera fase de demolición sin afectar a la vivienda colindante, hubo que redefinir todas las cotas del proyecto.

De cara al pueblo, la nueva vivienda se erige como una torre más del castillo por su fachada estrecha de piedra vista.

Aprovechando el desnivel del terreno, las estancias se escalonan y los volúmenes retroceden hacia la Peña del Castillo.

Dos magníficas terrazas en ambos extremos permiten disfrutar, por un lado, de la vista interminable sobre el valle al Suroeste y, por el lado contrario, de la sombra que ofrece la propia casa hacia los olivares y la Peña.